Localización y sitio

Ratisbona, una ciudad medieval situada a orillas del río Danubio, en Baviera, alberga varios edificios que dan testimonio de su historia como centro de comercio, así como de su influencia sobre la región desde el siglo IX. Ha conservado un número importante de estructuras históricas que se remontan a cerca de dos milenios, e incluyen edificios romanos, románicos y góticos. La arquitectura de Ratisbona de entre los siglos XI y XIII –que abarca el mercado, el Ayuntamiento y la Catedral– es lo que más caracteriza la ciudad; se encuentran inmuebles de grandes dimensiones, callejuelas oscuras y estrechas, así como importantes fortificaciones. Los edificios constan de casas y torres patricias medievales, un importante número de iglesias y conjuntos conventuales, así como el viejo puente de piedra, que data del siglo XII. Esta ciudad destaca también por sus vestigios que dan testimonio de su rica historia institucional y religiosa, como centro del Sacro Imperio Romano Germánico, que se  convirtió al protestantismo.

Morfología urbana

Las obras de restauración realizadas en los edificios antiguos de Ratisbona comenzaron a principios de los años ’60 del siglo XX. Representan un factor importante en la preservación del Sitio del Patrimonio Mundial que se denomina ahora “Ciudad Vieja de Ratisbona y Stadtamhof”.

Criterios de inscripción

La “Ciudad Vieja de Ratisbona y Stadtamhof” está inscrita como ciudad medieval en la Lista del Patrimonio Mundial desde 2006, teniendo en cuenta los tres criterios siguientes:

Criterio (ii): La arquitectura de Ratisbona refleja el papel que desempeñó como centro de comercio en la Edad Medial y su influencia en la región al norte de los Alpes. Esta ciudad era un importante centro mercantil en las vías comerciales continentales que llevaban a Italia, Bohemia, Rusia y Bizancio.  Asimismo, la ciudad tenía numerosos vínculos con las rutas intercontinentales de la seda. Todo ello propició un importante intercambio de influencias culturales y arquitectónicas que ha caracterizado el paisaje de la ciudad hasta nuestros días.

Criterio (iii): La ciudad vieja de Ratisbona constituye un testimonio extraordinario de las tradiciones del Sacro Imperio Romano Germánico. En la Alta Edad Media, Ratisbona era el lugar de encuentro predilecto para las Asambleas Imperiales; asimismo, durante la historia europea más reciente, aportó su contribución como sede de la Dieta Imperial Perpetua, de 1663 a 1806.  Los vestigios de ambos palacios reales, que se remontan al siglo IX, así como los numerosos edificios históricos bien conservados, son la prueba de una riqueza del pasado y de la importancia política de la ciudad.

Criterio (iv): La ciudad vieja de Ratisbona representa un excelente ejemplo de una ciudad medieval de comerciantes cuyas etapas históricas de desarrollo dentro de Europa están bien preservadas. El desarrollo del comercio, en particular entre los siglos XI y XIV, constituye una extraordinaria ilustración de este hecho.

Para obtener mayor información al respecto, sírvanse visitar: http://www.regensburg.de/de/unesco-world-heritage/60796

Referencias históricas

• Su carácter singular, por ser la “única gran ciudad medieval que ha conservado su autenticidad en Alemania”, y su notable importancia en el plano histórico han permitido a “la Ciudad Vieja de Ratisbona y Stadtamhof” ostentar el título de Sitio del Patrimonio Mundial de la UNESCO desde el 13 de julio de 2006.
• Incluso antes de ser nombrada Sitio del Patrimonio Mundial, Ratisbona era un destino turístico popular para los visitantes que acudían a ella para admirar las numerosas torres medievales y las calles estrechas y tortuosas de su ciudad vieja bien conservada, donde la circulación está reducida al mínimo. No obstante, la ciudad no era sólo un secreto de iniciados. Un crecimiento constante y sostenido del número de turistas da fe de esta realidad. Y si usted viene, aunque sea una sola vez, volverá, porque sabrá en lo sucesivo que dicha ciudad genial situada en la zona más septentrional del Danubio es más que una simple colección de tesoros históricos ; es también un lugar dinámico en el que se encuentran comercios, restaurantes, actividades recreativas, cultura y deporte.

Fuente: https://whc.unesco.org/en/list/1155/